martes, 17 de mayo de 2016

Cuentos e historias pra la ternura. OTRA VOZ CANTA Y CUENTA. Benedetti y Viglietti. 19 mayo 2016.

Hoy, 19 de mayo, es un aniversario luctuoso más de la partida a otra dimensión de ese gran ser humano que es Mario Benedetti. Y anoto que ¨es" porque él sigue vivo en nuestros corazones, en nuestras palabras de amor, en nuestra memoria personal y colectiva, porque se fue pero se quedó para siempre.

He pasado la mañana buscando una historia o cuento de su autoría y de repente recordé esta canción historia que hizo con otro gran hombre. Benedetti y Viglietti.

Es la historia de cuando los tiranos empezaron a desaparecer a mucha gente, y de la gente que aunque no la hemos encontrado, sigue ahí, viva, buscándonos y buscándose. Muy actual, muy presente. Así siempre es Benedetti, actual, presente, historias que nos recuerdan nuestras realidades.

Va pues esta historia cantada y contada. Espero les guste y que Benedetti viva siempre en nuestros corazones.


sábado, 14 de mayo de 2016

LA MÚSICA DEL CORAZÓN. Mario. Sábado 14 de mayo 2016.






Desde Coatepec, Veracruz, hoy llegó a mi casa Mario Torres. "Vengo a verte porque estoy al tanto de tu salud y quiero que sepas que cuentas conmigo". me dijo Mario, después de saludarnos con un fuerte abrazo.

Al momento de su llegada se encontraban conmigo mis dos hermanas y mis dos hermanos. Mario nos platicó de su trabajo entre la población de Xalapa,  de su constante brega por poner el TrabajonSocial al servicio de la población.

Él es especialista en Constelaciones Familiares y durante más de dos horas nos mantuvo atentos a su narración extraordinaria sobre esta terapia. "Pruébala, estoy seguro que te ayudará en tu sanación", me dijo. Y me habló sobre la importancia de estar en armonía con nuestra familia, con nuestro padre y nuestra madre.

Mario y yo compartimos luchas estudiantiles allá por el final de la década de los 70 e inicios de los 80, primero en la UPOME y luego en el Movimiento Revolucionario del Pueblo. Muchas veces pasamos horas y horas hablando sobre los problemas de la UNAM, de la Sociología y del Trabajo Social.

De piel del color de la tierra, Torres sigue conservando ese hablar tranquilo y sencillo de la juventud, solamente que ahora sus palabras van cargadas de mayor fuerza, más vehemencia y sencillez que las hacen convincentes al cuadrado.

Mario y sus palabras aparecen en el momento exacto en que yo necesito la palabra orientadora, la sonrisa amigable, la esperanza cargada de presente y  de futuro.

Al momento de despedirse, mi hermana le pregunta que posibilidades hay de que yo sea atendido en su terapia, a lo que él responde"En cuanto Cuauhtémoc me lo solicite, así será". En agradecimiento profundo le entrego un ejemplar de mi texto LAS VOCES DEL DOLOR, LA VALENTÍA Y LA ESPERANZA y un ejemplar de la película de Jodorowsky LA DANZA DE LA REALIDAD.

Han pasado alrededor de 32 años de no vernos a los ojos y hoy nos volvemos a encontrar. Y es que los hombres como Mario aparecen cuando uno más los necesita. Desprejuiciado, cariñoso y humanista, me dice sonriendo "Siempre que me hablan mal de una persona, yo confío en ella. Así sucedió cuando me dijeron que eras un traidor que asesoraba al PAN, no les creí, por eso estoy aquí."

Gracias Mario por tu amistad, gracias por existir, gracias por tus abrazos. Con gente como tu, la utopía renace.




martes, 10 de mayo de 2016

LA MÚSICA DEL CORAZÓN. Martes 10 de mayo del 2016.

Nuevamente en mi casa. Después de varios días en el Hospital General de la Ciudad de México hoy estoy aquí frente a la Mc para escribir esta experiencia.

Llegué ahí  porque en Urgencias de el Instituto de Nutrición me negaron la hospitalización ante un sangrado interno. "Es que solamente hospitalizamos a personas que vienen en situación de vida o muerte, y ese no es su caso" me dijo el joven doctor.

Contrario a mi peleonero espíritu, me fui y otra vez José Luis Estrada me ayuda a ser internado. En el HG encuentro la atención médica del doctor Del Valle y sus atinados diagnósticos, para luego ser atendido por un equipo de doctores en el que sobresale el doctor Gamboa, un joven médico atento, sencillo y concentrado en su trabajo.

Gracias a sus indicaciones fui atendido para una endoscopía gastrica y posteriormente una operación para ligar las várices que hoy me atacan. Todo parece indicar que la operación fue un éxito y me dieron de alta ayer lunes 9 de mayo.

La estancia ahí me dejó muchas experiencias. Desde observar a la multitud de persona que van a solicitar atención médica, mayoritariamente de los de abajo, con el color de la tierra en su piel, así como aprender como hay jóvenes de 25 años que enfrentan con valor y coraje al cáncer que los agrede  y ancianos que tienen el aliento de luchar por su vida. Muchos huevos de jóvenes, jóvenas, ancianas, ancianos, hombres, mujeres y familias enteras.

No cabe duda que somos un país con una franja muy amplia de población avasallada por las enfermedades, y así como hay negligencia médica en muchos casos (la actitud de los "médicos" de Nutrición ante mi sangrado), también hay doctoras y doctores concentrados y comprometidos con la población.

En estos días tuve la fortuna de ser visitado por amigas y amigos entrañables, que con sus palabras, abrazos, sonrisas, orientaciones y ejemplo me han estimulado a enfrentar con huevos esta enfermedad.

Mi hermano y maestro Elías Razo con su cariño y empatía, Tatiana, con su firmeza y sus orientaciones para cambiar mi actitud mental y enfrentar con valor, coraje y talento este momento. Rosa María Duran con sus enseñanzas del guerrero de la luz y del amor divino. La doctora Alicia Hernández, con su amistad de décadas y sus experiencia médica, y mi comadre Mariza que  tuvo la gentileza de visitarme y narrarme su testimonio de vida en contra del cáncer por más de 10 años, siempre acompañada por Diego.

Mariza, siempre en la lucha sindical y ahora pude conocer su lucha por la vida. Cuando ella se despidió de mi le dije de manera muy sincera "Gracias por venir, de verdad que eres el ejemplo que voy a seguir en en esta etapa fundamental de mi vida". Ella solamente sonrió y me dio un cálido abrazo.

También llegó Diego y me platicó a detalle esa lucha de toda la familia, de todo su amor, de toda sus pasiones. Una lucha sin cuartel ni sosiego, siempre atentos, siempre vigilantes.

Y el amor sin limite que me brindaron Celia, Mariana, Robert, Sabina y Cuate, así como Jimena, mis hermanas Sonia y Delta y mis hermanos Graco, Jesúsy Stalin

La experiencia clínica de la mano de la experiencia espiritual, emocional, amorosa y de defensa y lucha por la vida. La experiencia de ser una raza de guerreros.


No hay duda, la vida es, como me decían los compas allá en la escuela primaria en Tepito, la única oportunidad de echarle huevos para defender al barrio, a los del salón de clases, a la colonia, a la familia .... y a la vida de uno mismo. Así que... hay que echarle muchos huevos a esta guerra por el derecho a la vida. a la felicidad y al amor.